lunes, 28 de septiembre de 2020

Tu misteriosa forma me lastimará


 “El hombre es un aprendiz; el dolor es su eterno maestro”.

Alfred De Musset

 

Insistimos en la importancia de la filosofía porque mantiene encendido el germen de la inquietud intelectual. Queremos conocer y comprender, no nos vale la simple curiosidad sino que nos intriga toda aquella cuestión que demore una respuesta racional. La potencia del razonamiento parece estar desaprovechada por la soberbia que minusvalora la capacidad de pensamiento o por las condiciones impuestos de instantaneidad y distracción. Pero aunque queramos solo distraernos, las dudas persisten. Y muchas de ellas lastiman. Y duelen, porque el dolor sigue siendo un tema central y salvo los momentos rutinarios de la vida, la experiencia dolorosa tarde o temprano estará presente y en ese momento, peleamos, lo superamos o claudicamos en la más absoluta de las penumbras.

sábado, 26 de septiembre de 2020

Las raíces del amor donde estaban quedarán


 “Echar raíces quizá sea la necesidad más importante e ignorada del alma humana”.

Simone Weill

 

Cuando sentimos que nos hemos alejado de nuestra esencia a un límite de confusión permanente nos acordamos a la desesperada de que existen aún antes que nosotros y que siguen siendo el mejor parámetro expresivo. Han servido a la humanidad como un alma racional y no reciben nuestra correspondencia esencial en la evolución, motivados por el afán de conquistar más y más cemento. Simbolizan la creación, la vida, la belleza, el poder, la fijación a la tierra, las raíces, la ilación o secuencia, la vida y muerte, su mantenimiento y utilidad. Fue elemento sagrado, profanado, divino, conciliador, reparador, útil, desbastado o esquilmado; y en todo este tiempo su presencia nos recuerda el origen, la fuerza de la naturaleza. El árbol no es solo una alegoría permanente, es el barómetro de la vida, la propia y ajena.

lunes, 14 de septiembre de 2020

Esa triste canción de amor de la vieja molienda



El café vienés es una institución muy especial, incomparable con ninguna otra a lo largo y ancho del mundo”.

Stefan Zweig


Las cafeterías son aquellos lugares donde se consume tiempo, charla y espacio, pero solo aparece el café en la cuenta. Cada edad y grupo social suele tener sus cafés de referencia, es cuestión de sentarse y observar en distintos horarios, el cambio de la clientela que les frecuenta. En las mañanas y media tarde los pensionados y grupos; a media mañana y medio día, los profesionales; estudiantes y artistas de vanguardia, anónimos y simples aficionados a partir del inicio de la tarde; los profesionales, nuevamente a la caída de la tarde; y una amalgama de edades y estratos sociales en el nacimiento de la noche, para tertulias, lecturas o tomar un café en compañía o en soledad. Al momento de mencionar la cultura del café en un bar, son varias las referencias a utilizar. Desde finales del siglo XVII y fundamentalmente durante el momento dorado del XIX, el café vienes suele representar el saber vivir de un crisol de culturas y la práctica social por excelencia en la historia de la ciudad.

jueves, 3 de septiembre de 2020

El líder manda pero vos, vos te quebrás


 “He aprendido a no intentar convencer a nadie. El trabajo de convencer es una falta de respeto, es un intento de colonización del otro”.

José Saramago

 

Muchos de nosotros hemos valorado la dimensión de la palabra libertad promediando nuestra adolescencia. Estábamos mas hechos a la palabra dictadura. Al que supo valorar el cambio de estado no le pasó desapercibido que el nuevo orden tenia que mirar de soslayo a aquella porción de población que era afín o funcional al régimen depuesto y seguían en puestos de poder o simplemente, como miembros de la misma comunidad. Sin formalizarlo, los países debieron recurrir a una especie de pacto de impunidad, el deseo de recuperar la libertad apremiaba y los que se retiraban conservaban aún la fuerza que los hizo déspotas y tiranos. Y así surgen las transiciones sin que una parte no haya rendido incondicionalmente a la otra.