jueves, 19 de diciembre de 2019

Paralizándome


“Si estáis resuelto a no más servir, seréis libres”.
Etienne de la Boétie

Se debe entender que en realidad, el ser humano es débil. Se suele filosofar con énfasis sobre libertad, ideales, afán de justicia, valentía. Más allá de que es lógica la división entre valientes, héroes, anodinos, cobardes, tibios,  indiferentes o prudentes, a todos nos iguala una primera reacción: sucumbir ante el poder de una sola persona, ya sea porque su liderazgo aparente ser positivo o se trate de un tirano, mentiroso y lo que es más habitual en estos tiempos, manipulador o corrupto. Esta persona que nos domina no goza la mayoría de las veces, de dones especiales que lo puedan hacer único. Su talento puede venir dado por el histrionismo o el afán de liderazgo autoritario, que envuelve en un primer momento a sus adoradores para, al poco tiempo, convertirnos a todos en prisioneros o rehenes carentes de libertad y autonomía.

viernes, 13 de diciembre de 2019

Y ahora tengo que esconder las heridas


“El matrimonio es la principal causa del divorcio”.
Groucho Marx

El matrimonio es la puesta en escena de gran parte de la actividad comunitaria de un ser humano. Detrás de un ideal, sentimiento, pasión, arrebato u otras energías intempestivas, las personas se conocen, gustan, coinciden, enamoran y deciden formar familias que les permitan mejorar su condición de vida. Se supone el trabajo en equipo por excelencia, y hablamos de un concepto matrimonial en que las partes tienen una libertad de decisión donde prima el enamoramiento como razón esencial para casarse. Sobre esta base se puede construir este relato, sabemos por andaduras de la vida que no todo matrimonio bebe de esas fuentes, pero hoy aquí me basaré en esa condición que muchos superan, la de amarse. No toca hoy hablar de las obligaciones si están bien o mal repartidas o aceptadas, sólo del amor, para después divagar sobre lo que sucede cuando no hay más amor en la pareja.

sábado, 7 de diciembre de 2019

¿Oyes a la gente cantar? Cantando la canción de los hombres furiosos


“No hay nada más peligroso que la interrupción del trabajo, porque es una costumbre que se pierde. Costumbre fácil de perder y difícil de volver a adquirir”.
Los Miserables, de Víctor Hugo.

Fue una revolución reivindicadora de la participación social. Funciona desde entonces como una construcción mítica que adquiere una dimensión mundial. Es la rebelión o insurrección que todos quisiéramos experimentar en carne propia. A pesar de que en la memoria ha perdurado como un proceso fundacional, si lo miramos con los ojos de la historia pasada, podemos considerar que la Revolución Francesa ha sido otro fracaso, porque a pesar de sus ideales políticos y sociales, falló en lo más importante, la construcción de instituciones sólidas -en lo ético y justo- y duraderas que no permitieron la posibilidad cierta de un estado moderno. En realidad, no fue más que una revuelta, pero una que inmortalizó que la necesidad de justicia, libertad y equidad era posible, aunque nadie haya vivido para contarlo. Tantas cabezas guillotinadas promocionando el mito de la igualdad para seguir viviendo bajo falsas promesas.

domingo, 1 de diciembre de 2019

Yo no pedí nacer así, son cosas mías


“Estamos llegando al fin de una civilización, sin tiempo para reflexionar, en la que se ha impuesto una especie de impudor que nos ha llegado a convencer de que la privacidad no existe”.
José Saramago

La sensación que transmiten nuestras sociedades modernas es extender cuanto se pueda la exposición en todos los espacios sociales donde la persona no se sienta completa sin esa mirada aprobatoria de su sociedad íntima. “Todo el mundo tiene tres vidas: la privada, la pública y la secreta”, alguna vez declaró Gabriel García Márquez. Elías Canetti también opinó: “Leernos sí, pero no conocerlos” para referirse a la privacidad del que oficia el arte de escribir. Pero hoy parece difícil separar las tintas, se juzga por un todo y a veces no se tiene en cuenta la faceta que sólo se debería valorar, en este caso la escritura, su función pública.