martes, 25 de enero de 2022

Cuando se acabe la fiesta, la tribu estará sedienta

Nunca escribas sobre un lugar hasta que estés lejos de él”.

Ernest Hemingway


En la Gran vía de Madrid, los protagonistas toman un taxi. “¡Oh, Jake!, ¿podríamos haberlo pasado genial juntos”, preguntó Brett. “Sí”, dijo Jake. “¿Verdad que resulta agradable imaginárselo?”, con una pregunta finalizaba la primera novela de Ernest Hemingway, allá por 1926. Similar a “siempre nos quedará París” de “Casablanca”, la literatura directa del escritor americano nos recordó que en el pensamiento de todo ser humano, siempre radicará la duda si no es más bonito suponer que todo lo imaginado pudiera ser posible. “The sun also rises”, novela que en castellano fue simplemente “Fiesta”, obra que dio celebridad a su autor y representó a toda una camada que fue denominadaGeneración perdida”.

martes, 18 de enero de 2022

Llegué a la casa de un artista, lo encontré corto de vista

Escribir es lo interminable, lo incesante”.

Maurice Blanchot.


El espacio literario es esa especie de lugar donde se gesta la literatura. Un lugar que puede ser el propio mundo, la inagotable fuente de material publicable. También el propio mundo interior, tan cercano pero a veces distante para aquellos que no saben o no pueden expresar sus emociones o pensamientos. La soledad del escritor parece ser el elemento mas cercano del que dispone aquel que se enfrenta a una página en blanco para manifestar sus ideales, creencias, imaginación o estilo. Para muchos solo puede ser una actividad comercial más, ya que se le da bien. Ese espacio literario abarca al hecho trascendente de la obra literaria. Pero somos muchos los que naufragamos en el intento y el motivo de hoy, sería preguntarse en que orilla estamos sucumbiendo.

martes, 11 de enero de 2022

El sueño que yo soñé es la humanidad, es la humanidad

Todo lo que nos sucede, incluso nuestras humillaciones, nuestras desgracias, nuestras vergüenzas, todo nos es dado como materia prima, como barro, para que podamos dar forma a nuestro arte”.

Jorge Luis Borges

Vivimos en un mundo de cambios. Dicha percepción, es mas tangible en estos tiempos, mucho más acusado que en el pasado. El mundo conocido -para los ciudadanos analógicos- nos parece extraño, irreconocible. Y nos da miedo perder esa sensación de referencia, además de generarnos inseguridad. El mundo parece ser de los jóvenes y la tecnología es la punta de lanza icónica del cambio descontrolado. En esa sensación de desfasaje temporal, vuelve una y otra vez una frase que se utiliza para todo momento: “venido a menos”. Frase que tal vez, sea la innegable condición del ser humano en el paso del tiempo, en todos los sentidos, envejecemos.

jueves, 6 de enero de 2022

Tienes un email

Temo el día en que la tecnología sobrepase nuestra humanidad; el mundo solo tendrá una generación de idiotas”.

Albert Einstein

El interrogante inicial es querer saber si esto que escribo es una manera de comunicación. Si me baso en el feed back que genero, más bien podríamos hablar de un monólogo. No suele haber intercambio de opiniones, críticas ni halagos. A lo sumo, al colgar el link en redes sociales, recibiré inmediatos “me gusta” que es la manera de comunicar que genero, que me halaguen la publicación en sí. Lo llamativo es que este block no se especializa en publicar textos del tipo “el perro más monono” o “el gato más listo del mundo”, que tal vez me darían una viralidad impensada. No, me ofusco en pensamientos tal vez recurrentes vinculados a la manera de relacionarnos, comportarnos o comunicarnos, ligados con pensamientos o actitudes que he vivido en el mundo previo a este tecnológico. Pero, no logro comunicar, solo dejo una referencia asentada de un disgusto por las situaciones que no me agradan.