“El lanzador de cuchillos por llevarse algo al bolsillo trabaja de afilador”.
Joaquín Sabina – Vinagre y rosas
Parece que la vida sin impronta es menos vida. Por eso abundan las florituras, los excesos y los calificativos. Las metáforas o hipérboles son figuras retoricas vinculadas a la literatura pero su origen es la vida misma. A veces nos empeñamos en competir en exageraciones. El lugar común parece ser confortable y nos esmeramos en lucir el discurso. Por ende, encuadro esta temática dentro de lo literario, ya que esas figuras retóricas mencionadas, se utilizan en la escritura para embellecer, persuadir y comunicar estéticamente una idea. En la vida, colgamos cartelitos a cada paso, por ejemplo, la soledad o locura del autor o el artista famélico.